La fiesta del Cascamorras es una de las más divertidas de España y fue declarada ‘Fiesta de Interés Turístico Nacional’ en 2006 aunque tiene más de quinientos años de historia.
La famosa ‘Carrera del Cascamorras’ se celebra el 6 de septiembre en Baza y el día 9 en Guadix. El Cascamorras es un bufón vestido de vivos colores que llega a Baza de Guadix acompañado por un tamborilero y una comitiva con un solo objetivo: llevarse la imagen de la patrona de la ciudad, la Virgen de la Piedad, hasta el convento de la Merced.
Sin embargo, los lugareños de Baza no se lo ponen fácil e intentar impedírselo arrojándole pintura negra y persiguiéndolo por todas las calles del pueblo. Si el Cascamorras consigue llegar sin que le manchen, habrá conseguido su objetivo: devolver la imagen de la Virgen a Guadix. El día 9, el Cascamorras regresa a Guadix con las manos vacías, lo que hará que los habitantes se enfaden y lo vuelvan a manchar y perseguir.
En realidad, no se usa pintura sino aceite quemado y agua.
Esta antigua tradición es de origen legendario y se remonta en torno al año 1490 y es parecida en los incidentes a muchas leyendas en torno a disputas de imágenes religiosas. Según la leyenda, después de la Reconquista de Granada por parte de los reyes Católicos, un agricultor de Guadix llamado Juan Pedernal se encontraba trabajando la tierra en Baza cuando descubrió la talla de la Virgen María e intentó llevársela a Guadix.
Esto motivó un pequeño conflicto entre las ciudades de Guadix y Baza, que hubo de resolverse en los tribunales, pues alegaban unos que el autor del hallazgo era de Guadix y otros que se había encontrado en Baza y, por tanto, allí correspondía. Finalmente fue encomendada la custodia de la imagen a los habitantes de Baza aunque, según la justicia, el pueblo de Guadix tenía derecho de disponer de la misma un día al año para poder dedicarle los cultos religiosos oportunos.
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